TRAUMATISMOS VERTEBRALES

Los traumatismos de la columna vertebral pueden afectar a todas las estructuras que la componen (Muscular, ligamentos, Vertebras, Nervios periféricos,  Vasos sanguíneos y Medula espinal). Según la intensidad del golpe, la localización del mismo o el mecanismo de producción, pueden verse afectadas una o varias partes de la columna.

ESGUINCE Y LUXACIÓN VERTEBRAL

Se denomina esguince vertebral, cuando el traumatismo produce un estiramiento brusco de los músculos  o una distensión  de los ligamentos que protegen y conservan la movilidad vertebral normal. Un ejemplo frecuente de quejas y de demanda legal de los pacientes,  es el llamado “síndrome del latigazo cervical” que suele ser provocado por el típico caso de choque trasero de automóvil. Según la severidad y la afectación de estas estructuras anatómicas se pueden alterarse en mayor o menor medida la alineación vertebral, produciéndose diferentes grados de luxación vertebral. 

Los síntomas más frecuentes de los esguinces suele ser el dolor, la inflamación, y los hematomas de partes blandas (contusiones). La gran mayoría de estos traumatismos vertebrales pueden tratarse sin necesidad de una intervención quirúrgica.

FRACTURAS VERTEBRALES

Para que se produzca una fractura vertebral en un persona adulta y sana, tiene que haber un traumatismo de gran impacto dinámico, sin embargo, si el hueso de mala calidad o está muy debilitado, por ejemplo en el caso de osteoporosis, la fractura puede producirse con un traumatismo leve o al realizar un esfuerzo en carga.

TIPOS DE FRACTURA:

• ESPONTÁNEAS
  • Tumoral o patológica
  • Por osteoporosis
• POR TRAUMATISMO

En la clínica Neuroquirúrgica Jaén, tratamos todo tipo de fracturas vertebrales con técnica mínimamente invasiva. El objetivo fundamental de la cirugía,  es descomprimir la medula espinal en caso de haber una compresión, reducir el dolor, evitar la deformidad  y conservar la alineación  normal para una correcta recuperación anatómica y funcional

FRACTURAS VERTEBRALES DE ORIGEN TUMORAL

Los tumores vertebrales pueden ser

• Primarios: Se generan y se desarrollan dentro la estructura anatómica ósea o sanguínea que constituye la vértebra afectada. Estos tumores pueden ser benignos o malignos. Los tumores primarios más frecuentes son los Angiomas, sarcomas, osteomas, Mielomas o plasmocitomas.
• Secundarios (metástasis): Son tumores que se originan en otra parte (las más frecuentes son las metástasis de origen pulmonar, renal, pró stata, o de mama. Las células tumorales de estos canceres, se transportan a través de la corriente sanguínea, hasta la columna vertebral.

Los síntomas de los tumores vertebrales suelen ser: Dolor intenso y refractario al tratamiento farmacológico, que empeora progresivamente con aumento de la intensidad y la frecuencia en poco tiempo, impotencia funcional, y disfunción o afectación neurológica.

TRATAMIENTO QUIRÚRGICO

La decisión de realizar una intervención quirúrgica de un tumor vertebral, debe consensuarse de forma conjunta con otros especialistas (Oncología médica, Oncología Radioterápica o Hematología) tras discusión detallada de cada caso. El objetivo de la cirugía de los tumores vertebrales, es la extirpación del tumor para analizarlo, la estabilización de la columna y la descompresión de la médula espinal

FRACTURAS POR OSTEOPOROSIS

Cuando una persona sufre de descalcificación ósea, se dice que tiene osteoporosis, (hueso en esponja o de mala calidad) en muchas ocasiones un mínimo esfuerzo como agacharse para ponerse unos calcetines o una tos fuerte  puede provocar una fractura del cuerpo vertebral

Los síntomas fundamentales son el dolor y la pérdida de altura por hundimiento de las vértebras. Las personas que padecen de dolor intenso y de  una deformación relevante de la columna, la cirugía puede estar indicada según su tiempo de evolución.

¿EN QUÉ CONSISTE EL TRATAMIENTO?

La vertebroplastia y la  Cifoplastia son los procedimientos quirúrgicos recomendados específicamente para las fracturas por compresión vertebral. Son procedimientos mínimamente invasivos que consisten en inyectar bajo control radiológico, un cemento especial biocompatible en el cuerpo vertebral roto. Este tratamiento se utiliza principalmente para aliviar el dolor,  evitar las deformidades y mejorar la resistencia del cuerpo vertebral. 

FRACTURAS TRAUMÁTICAS

Para que se pueda producirse una fractura vertebral, tiene que existir un golpe de gran impacto energético.  Dependiendo del mecanismo y de la gravedad de las fracturas, estas pueden ser:

• Simples: Cuando afectan a una sola parte anatómica de la columna vertebral que puede ser la lámina, apófisis espinosa, cuerpo vertebral,  pedículos, o apófisis transversa. No suelen producir alteraciones ni falta de la alineación vertebral y  Este tipo de fracturas simples “que a veces pasar desapercibidas en las radiografías” suele causar dolor localizado, moratones e inflamación pero sin dejar secuelas neurológicas o de estabilidad. El manejo general se establece mediante tratamiento conservador de los síntomas y con reposo de la parte afectada. A veces precisa de un collarín sí la fractura es a nivel cervical, o de cursé si está localizada a otro nivel.
• Complejas: Son de mayor gravedad y generalmente afectan a varias partes de una vértebra o varias vértebras. Este tipo de fracturas, suele comprometer la integridad anatómica y la estabilidad de la columna y puede asociarse con afectación neurológica leve o severa. El tratamiento suele ser quirúrgico mediante fijación con laminas o barras y tornillos metálicos.